27 febrero 2009

Que fácil es hacerme feliz

Estoy feliz. La semana pasada estuve en Baqueira, con una compañia inmejorable, una calidad de nieve impresionante y un tiempo estupendo. Me lo pase teta. Sin duda alguna, las mejores vacaciones en la nieve de toda mi vida. Después de la semana de vacaciones vuelta al curro. Pero de la mejor forma posible, quedandome en la oficina, sin hacer salidas, y saliendo a mi hora, o casi, todos los días. Esto es una maravilla. Y para terminar, este finde semana, me voy a meter con mi grupo en un estudio de grabación, o algo parecido, y vamos a grabar 4 canciones que tenemos preparadas. No me cabe un paja por el culo ahora mismo.

Desde siempre me ha gustado la musica, empezé con la guitarra clasica, yendo a clases de guitarra y solfeo 2 o 3 dias por semana, aprendido música desde la parte teorica, solfeo, leer partituras, algo de armonia. Pronto me canse de la guitarra española y me pasé al teclado electronico. Pero seguí yendo a clase para aprender musica. Tras algunos años en los que abandoné un poco el tema, volví a la música, esta vez con la guitarra electrica, en una banda de rock. Tras un año ensayando en la keli de sanse todos los viernes, dimos un concierto, junto con todos los demás grupos que estaban aprendiendo en la keli para todo aquel que quisiese ir, y supiese del concierto, que basicamente eramos los grupos que tocabamos y sus colegas. Aun recuerdo los nervios antes de subir al escenario, el miedo a no acordarme de las canciones, el panico a equivocarme en algún momento y joder la canción. Subimos al escenario. Luces en la cara, un wevo de gente (quizas 100 personas) metidas como sardinas en lata en la pequeña sala de conciertos de la keli, con ganas de saltar, cantar y pasarlo bien. Empezamos en concierto.
Durante los ensayos lo pensamos bien. Teniamos 3 canciones preparadas: La senda del tiempo de Celtas Cortos, Jesucristo García de Extremoduro y Basket case de Green Day. Ese iba a ser el orden para tocar. De menos a mas. Primero meter un poco a la gente en el concierto con la senda, luego subir el ritmo y hacer que canten todos con la letra que todo el mundo conoce de Jesucristo, y por ultimo hacer que reventará la sala con la fuerza de Basket case. Y funcionó. O eso me parecío en su momento. Ver como la gente canta con tu grupo una canción, que disfruta de lo que está oyendo es una sensación impresonante. Darte cuenta de que hay un tio tumbado sobre las manos de todos los bestias que están saltando y gritando y que le pasean de un lado a otro de la sala es algo que me quito el aliento. Y terminar el concierto y saber que ha salido bien, solo te lleva a un pensamiento: ¡¡QUIERO MÁS!!

Ahora la situación ha cambiado. Por aquel entonces yo tenia 15 años, apenas sabia tocar esas tres canciones, y porque estaba obligado para poder hacer el concierto. Solo llevaba 1 año tocando la guitarra, estudiaba en el instituto, con lo que tenia todas las tardes libres para ensayar e intentar mejorar, y solo eramos 5 quinceañeros con ganas de pasar un buen rato, sin mas pretensiones.

Ahora tengo un verdadero GRUPO DE ROCK. La gente con la que toco son unas maquinas. Saben tocar, y quieren tocar. Quieren hacer cosas nuevas y estan siempre con alguna cosa nueva en la cabeza, un arreglo nuevo para una canción, una letra nueva, una sugerencia para que las canciones suenen mejor. Yo ya llevo mas de 10 años con la guitarra (aunque apenas haya mejorado desde hace 7), trabajo, y mucho, y viajo, demasiado, pero aun así siempre hay tiempo para ir a ensayar. Somos 6 tios (lastima que no haya ninguna tia, jeje) con ganas de hacer algo, motivados, y sinceramente, no sonamos mal. Está claro que nos falta mucho por aprender, pero podemos llegar a hacer algo. Quizas no llenar el Palacio de los deportes de Madrid dos días consecutios como Extremo, o quizas dentro de unos años estamos llenado estadios en Europa, Latinosmerica...No lo se. Lo único que se es que esto pinta bien.

Grabación este finde, el mayo concierto en fiestas de alcobendas... Tengo muchos motivos para estar feliz. Y espero que las cosas sigan así por mucho tiempo.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Me alegra saber que el volver a meterte en la música haya contribuído en hacer que seas algo más feliz.

Un abrazo